Por: Bryan Steven Cardona Ciceri

El presidente Gustavo Petro reaccionó fuertemente a la absolución de Álvaro Uribe, cuestionando la justicia y vinculándola a la historia de la parapolítica. Convocó a una movilización en la Plaza de Bolívar para impulsar el poder constituyente.

El presidente Gustavo Petro reaccionó con contundencia este martes al fallo del Tribunal Superior de Bogotá que absolvió al expresidente Álvaro Uribe Vélez. La decisión judicial dejó sin efecto los cargos por presunta manipulación de testigos y fraude procesal, un dictamen que el mandatario cuestionó duramente. Petro señaló que el Tribunal "repite la historia" y "contradice a la Corte Suprema de Justicia", abriendo un nuevo capítulo en el debate judicial y político del país.

El mandatario hizo énfasis en una interceptación telefónica clave, afirmando que en ella "aparece la voz de Uribe hablando de sobornos", pese a que ahora el Tribunal la calificó como un asunto de "intimidad". Fue en este contexto que Petro declaró: "Así se tapa la historia de la gobernanza paramilitar en Colombia". Continuó explicando que se refiere a "la historia de los políticos que llegaron al poder aliados con el narcotráfico y que desataron el genocidio en el país".

La controversia judicial se entrelaza, según Petro, con una coyuntura internacional compleja. El jefe de Estado aseguró que el expresidente estadounidense Donald Trump, a quien describió como "aliado con estos políticos y con Uribe", buscaría promover sanciones en su contra. Estas presuntas acciones serían una represalia por haber denunciado públicamente "las alianzas entre el poder político colombiano y el narcotráfico paramilitar".

Finalmente, el presidente Petro alertó sobre movimientos internos, indicando que en la Comisión de Acusaciones de la Cámara "ya buscan el golpe de Estado", implicando a "los que están metidos en el desfalco del Fomag". Ante este panorama, el mandatario convocó a una movilización ciudadana este viernes en la Plaza de Bolívar de Bogotá. Allí se iniciará la recolección de firmas para impulsar el poder constituyente, con la firme convicción de que "quien define no es Trump, es el pueblo".